Según cuentan, en el inicio cuando los Dioses aun eran mortales, existía una bella joven llamada "Ixchel". Muchos la pretendían y entre todos ellos había un joven llamado "Itzamná" y otro de nombre desconocido. Ellos siempre reñían constantemente por el amor de ella.
Un día, "Ixtab" hermana de "Ixchel" dijo a ambos contrincantes que peleen hasta que uno de ellos caiga. El sobreviviente se quedaría con su amada. Tras una ardua lucha y una victoria segura para Itzamná, en un descuido su contrincante aprovechó el momento e hirió de muerte a Itzamná por la espalda, al poco rato, murió.
Ixchel al ver morir a su amado, corrió del lugar y encomendando su alma a Ixtab, se suicido. Ixtab, maldijo aquel Hombre que con trampa liquidó a Itzamná. Con el pasar del tiempo, su nombre aun desconoce y no se supo que fue con él.
Mucho tiempo después, Itzamná pasó a convertirse en el Dios Sol e Ixchel se convirtió en la Diosa Luna y esposa. Ixtab por otra parte al ser encomendada el alma de su hermana, se convirtió en la Diosa del Suicidio.
La Diosa de la Luna (Quintana Roo) |
Se dice que en cada Fuego Nuevo, la diosa Ixchel renace de él, y permite a las doncellas enamorarse y dar fruto de aquel amor, un hijo. También se le considera la Diosa del Nacimiento y la Fertilidad.