Cuenta la historia de Cupido, el dios romano del amor quien era representado como un niño pequeño con alas y con un arco. Éste tenia unas flechas que podían hacer que uno se enamore instantáneamente a quienes alcance, así como también, tenía otras flechas que podían causar un gran rechazo igual de fuerte.
Cupido siempre se la pasaba divirtiéndose y haciendo travesuras con los sentimientos de cualquier persona o Dios, generando grandes problemas. A veces volaba con una venda en los ojos para demostrar, que el amor es ciego.
Se dice que cuando Él estaba cerca de su hermano Anteros (Dios que representa al amor correspondido y vengador del amor no correspondido), se convertía en un un joven adulto, pero cuando se alejaba de este, volvía a convertirse un niño.
El Mito de Cupido |