Cuenta el mito, que las Tres Gracias, era tres diosas hijas de Zeus y la ninfa Eurinome ( hija del titán Océano). Los nombres de estas eran: Áglae o Aglaya, Eufrosine y Talía, y ellas eran de la belleza, el hechizo y la alegría.
Cada una de ellas le correspondía una cualidad como por ejemplo, la belleza, la jovialidad, el esplendor o el buen gusto, sin embargo, cada una de ellas hacia uso de estos dones a su antojo por lo que no puede establecerse una clasificación clara.
Las Gracias presidían los banquetes, danzas y todas las actividades y celebraciones placenteras; en otras palabras, todo aquello que pueda ser agradable, placentero, interesante, atractivo en el mundo. Estas diosas daban a dioses y mortales la alegría así como también, la elocuencia, liberalidad y la sabiduría. Muchos creían que ellas tenían la capacidad de dotar a los hombres de la genialidad necesaria para ser excepcionales artistas. Por otro lado, las Gracias eran compañía habitual en el Olimpo de Afrodita y Eros y están muy relacionadas con las Musas con las que gustaban divertirse al son de la música que Apolo hacia.
Las tres Gracias o Cárites |
Áglae la más joven de estas Gracias, era también la más bella y estaba casada con el dios Hefesto. Las tres Gracias eran jóvenes y muy bellas, pero muy modestas, ademas, solían llevar sus cabellos mal recogidos a causa de los bailes donde siempre estaban danzando tomadas de la mano y claro, este acto es donde más han sido representadas en el arte.
Aunque en los principios de la civilización Griega, ellas iban vestidas con una fina túnica, después siempre aparecían desnudas. Otras veces han aparecido entre los Sátiros más horribles con el fin de que no se puede juzgar a las personas por su apariencia, y que los defectos físicos, pueden ser muy distintos a un buen espíritu.